Sólo un segundo

Ojalá sólo fuese un segundo, 

un sólo instante, 

que aparece y desaparece

sin dañar y sin matarme.

Un segundo de un beso,

una centésima envolviendo una caricia,

el instante de un suspiro,

uno sólo me basta.

Después

morir en los brazos del recuerdo,

sumergirme en el abismal océano

de tus infinitos ojos,

para acabar deshojando la nostalgia,

desde la inmensidad de la niebla,

como un pájaro libre,

que eleva sus alas,

desde la eternidad del sentir, 

sobrevolando la Nada.

 Ada Luz MR

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